Marlaska encarceló a otro de los etarras de Bildu por ser un «comisario político de la ortodoxia de ETA»

Egoitz Garmendia Vera es uno de los condenados por terrorismo que concurrirán a las elecciones del 28 de mayo en las listas de Bildu. En 2016, fue condenado a dos años de prisión por pertenencia a organización terrorista por formar parte de Ekin, considerado el entramado político más duro de ETA. Se da la circunstancia de que fue el ahora ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien, en 2010, y tras su detención, decretó el ingreso en prisión incondicional para Garmendia -junto a otros ocho detenidos- por transmitir las directrices de ETA a los dirigentes de la izquierda proetarra. Con aquella operación, el Ministerio del Interior -entonces bajo las órdenes de Alfredo Pérez Rubalcaba- dio por desarticulada la dirección nacional de esta red al servicio de la organización terrorista.

En el auto, al que ha tenido acceso OKDIARIO, Grande-Marlaska detalla cómo Garmendia y el resto de detenidos, en tanto «militantes de Ekin», ejercían como «verdaderos comisarios políticos que velan por la ortodoxia de la línea marcada por ETA».

El juez, en base a distinta documentación incautada, describe también el papel central que jugaba esta organización entre la izquierda proetarra y «la enorme influencia» que ejercía sobre las distintas direcciones «que acatan disciplinadamente» las decisiones «impuestas desde ETA/Ekin, anulando el debate interno en el seno de las organizaciones de la izquierda abertzale».

Marlaska destaca además qué documentos intervenidos en las sucesivas operaciones desarrolladas desde que el Tribunal Supremo condenara a 38 miembros del aparato político de la banda, hacía un año y medio, venían a constatar «la continuidad de Ekin como la estructura que, bajo la dirección de ETA, es la responsable de dirigir, coordinar y dinamizar al conjunto de organizaciones que forman la denominada izquierda abertzale». 

«Los soportes documentales intervenidos corroboran sin lugar a dudas la existencia actual de Ekin así como su papel decisivo en la dirección política de la izquierda abertzale bajo las directrices de la propia banda terrorista ETA», insistía Marlaska en la resolución. «Con la creación de Ekin», proseguía el juez, «la banda terrorista consolidó el modelo actual de dirección de la izquierda abertzale, que se asienta sobre el liderazgo de ETA, como vanguardia armada, auxiliada por Ekin para codirigir todo el entramado de organizaciones», con la misión principal de «movilizar a la sociedad y mantener las luchas» para la «construcción nacional»

«De la instrucción concluida al momento histórico procesal, y en grado de seria probabilidad, se concluye cómo la organización terrorista ETA mantiene dentro de su entramado criminal un conjunto de frentes, consecuencia de su estrategia de desdoblamiento, todos ellos sometidos a sus directrices. Dentro de esos frentes se encuentra Ekin, dedicada principalmente a la dinamización de las distintas asociaciones ilegales de la izquierda abertzale dentro de la denominada construcción nacional y bajo las directrices expresas de ETA». El juez situaba a Garmendia como responsable de «estructura», uno de los tres sectores de la dirección del entramado.

En 2016, Garmendia fue condenado a dos años de prisión. La pena, como en el resto de los acusados, se vio sustancialmente reducida al renunciar a la violencia y alcanzar un acuerdo de conformidad con el fiscal y las acusaciones, ejercidas por las asociaciones de víctimas.

Socios

Bildu concurre a las elecciones del 28M con 44 condenados por terrorismo entre sus candidaturas. Siete de ellos, con delitos de sangre, han anunciado que renunciarán al acta sin son elegidos. Pero en las listas se mantienen otros sentenciados que, en muchos casos, tuvieron un papel clave para la comisión de atentados terroristas. Algunos, como Garmendia, ejercieron como miembros de entidades al servicio de la banda. Otros, fueron juzgados por actos de kale borroka, como chivatos o por alquilar «pisos franco» a los etarras, proporcionarles vigilancia o ayudar a los comandos a cruzar la frontera. También hay etarras que no llegaron a consumar sus atentados, o cuyas acciones, afortunadamente, no provocaron muertes.

El partido de Arnaldo Otegi se ha convertido en un socio preferente del Gobierno de Pedro Sánchez quien, pese a la polémica, no renuncia a pactar con Bildu tras el 28M. Es más, el presidente socialista ya ha tendido la mano a la formación para que le apruebe el decreto de medidas económicas que tiene previsto llevar en junio al Congreso.